Buenas Aventuras

En general, la religión es aburrida. Sin embargo, no hay nada más interesante en toda la creación que Dios mismo. No hay aventura mejor que las que podemos tener con Jesucristo. Siempre resultan buenas, y las historias no tienen nada de aburridas. Ser "bienaventurado", equivale a ser bendecido. Hace más de 40 años empecé a tener aventuras con Cristo. Aquí comparto contigo algunas de mis historias.

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Lugar: Indiana, United States

30.5.07

Un pájaro caído


Hoy estaba disfrutando del canto de los pájaros cuando encontré en el suelo lo que parecía ser parte de una ala de pájaro. Desconozco la historia del dueño, pero sin una ala a lo mejor no está volando. Me puse muy, pero muy triste, más triste de lo que yo habría pensado razonable. Ese pájaro no era nada especial para mí, pero me caían lágrimas.
Vinieron a mi mente las palabras de Jesucristo, "¿No se venden dos pajarillos por una monedita? Sin embargo, ni uno de ellos cae a tierra sin que vuestro Padre lo permita." (Mateo 10: 29)
Sentía que a Dios también le doliera lo que había pasado con el pájaro. Luego pensaba en lo que Jesús dijo después, "Vosotros valéis más que muchos pajarillos." Yo lloraba por un pájaro mientras alrededor de mí había gente sufriendo por muchas razones, gente que vale mucho más que un pájaro. Me falta perspectiva. Necesito que el Señor me dé más compasión por mis vecinos.

10.5.07

No te preocupes, hija

A pesar de que todo iba bien, yo estaba preocupada. Tradicionalmente mi papel en la dinámica de nuestra familia ha sido de imaginar todo lo que podría salir mal y preocuparme por eso. No es nada cómodo, pero a veces ha sido útil. El problema principal es que esta tendencia natural que tengo milita contra la fe y la paz.

En tal estado llegué a mi cita diaria con el Señor hace un par de días. Me tocaba leer el Salmo 37, porque el día anterior había leído el 36. Sentía que las tres primeras palabras del Salmo saltaban de la página. Leía en inglés "Do not fret", que significa "No te inquietes". Siempre he mantenido que el mejor lugar para encontrar dirección para un día difícil es el pasaje bíblico que naturalmente toca, y parece que otra vez era cierto. Luego el mensaje se repitió dos veces más en los versículos 7 y 8. El versículo 8 lo amplía un poco y dice, "no te inquietes - eso solamente te lleva a mal."

Y era cierto. No podría mejorar la situación preocupándome. Mas bien el estar tan inquieta convertía mi oración en un acto de quejarme con el Señor, que nada aprovechaba. Pude convencerme a dejar el asunto en las manos de Él y relajarme.

Resulta que Dios ya conocía mi preocupación y ya se había encargado del asunto. El único problema que quedaba era yo. Me corrigió con firmeza pero con cariño. Hasta había arreglado que leyera el pasaje en esa traducción, porque luego averigüé que otras traducciones, igualmente válidas, no habrían tenido el mismo impacto en el momento.

No te inquietes.

3.5.07

La cita en el autobús

Yo quería ir a visitar a una amiga que había perdido a su marido. Ya le había dado el pésame, pero sabía que se sentía sola y dolida, y quería acompañarla. Sin embargo no podría ser el lunes por tarde. Yo tenía que ir a una reunión en Sevilla.

Apenas había salido de la casa cuando oí pasar el autobús. Di un suspiro de frustración, porque perder el bus a esa hora quiere decir que hay que esperar por lo menos media hora para que llegue otro. Seguí con paso lento a la parada. Cuál era mi sorpresa encontrar a mi amiga sentada allí. Ella también había perdido el bus.

Hablamos durante la media hora de espera y durante el viaje. Luego caminamos juntas un poco, como íbamos en más o menos la misma dirección. Así que tuvimos más de una hora juntas. Cuando nos despedimos ella decía que se sentía muy acompañada, muy amada por el Señor por haberle dado compañía. Por mi parte, yo me había divertido mucho con la conversación y me encontré con buen ánimo para ir a mi reunión. Ella me había ministrado a mí igual que yo a ella. Además creo que ella tenía razón, que había sido la mano de Dios que hizo que las dos perdiéramos el bus. Él nos había dado una cita.

Cada vez que algo así me pasa recuerdo lo que dice en la Biblia, en Romanos 8: 14, "Todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios." No dudo que sea hija de Dios, pero me anima cada vez que me da esta evidencia.